Dirección:
Santa Katalina Kalea, s/n
La ermita de Santa Catalina situada en la península del mismo nombre, data del siglo XIX. Es un lugar privilegiado por la belleza del entorno y su situación estratégica justo en la entrada de la ría, dominando cualquier entrada y salida de la misma. Es un edificio de transición entre el gótico y el renacimiento. Las murallas que rodean la ermita, son antiguos restos del fortín de la misma época.
Durante su historia y debido a su lejanía del núcleo urbano ha tenido diversos usos, como lugar de reuniones de la cofradía de pescadores y de cuarentena para enfermedades o epidemias.